La tecnología HIFEM (electromagnética focalizada de alta intensidad) induce contracciones musculares supramáximas que no se pueden lograr mediante la acción voluntaria. Cuando se expone a contracciones supramáximas, el tejido muscular se ve obligado a adaptarse a condiciones tan extremas.El músculo responde con una profunda remodelación de su estructura interna, es decir, el crecimiento de miofibrillas (hipertrofia muscular) y la creación de nuevas cadenas de proteínas y fibras musculares (hiperplasia muscular). Este proceso da como resultado un aumento de la densidad y el volumen muscular.